Como cualquier otro sábado, los comerciantes y feriantes se acercan a Arteixo a ofrecer sus productos, con una peculiaridad, a diferencia de otros días, son muchos los vendedores que acuden con los gallos que crían ellos mismos e incluso alguno acude desde localidades limítrofes con esa única intención. Todos los vendedores de gallos de corral entran como participantes en un Concurso donde el jurado elige los mejores ejemplares, según su propio criterio. En un acto público se entregan diferentes premios en metálico.
Durante la celebración, la feria está amenizada con diferentes actos lúdicos, culturales y folclóricos, también se pueden degustar diferentes platos, en los que el protagonista principal es el gallo de corral , en los establecimientos hostelero del pueblo.

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